Cuando se trata de redes sociales (por ejemploe Facebook) sé razonable e intentar establecer expectativas razonables. Establecer una prohibición podría cortar la comunicación con tu hijo/a y empujarle a utilizar Internet con una mayor exposición a incluso mayores riesgos.

	Lee las condiciones de uso de una red social para ver si tu hijo/a cumple el requisito de edad para participar en ella.
	Ayuda a tus hijos/as cuando se creen un perfil en una red social. Enséñales a no publicar nunca información personal en la red (nombre, dirección, datos de la familia, de sus lugares habituales, de su escuela/instituto, etc.).

Si tu hijo/a se cruza con algo o alguien que le hace sentir incómodo en la red, explícale que puede contar contigo, sin miedo a perder el ordenador o Internet.
Haz un seguimiento del uso de cámaras Web y de la publicación o el intercambio de imágenes. Explícales que no deberían publicar ninguna foto sin el permiso de los padres.
Remárcales que en Internet la gente puede aparentar ser quien no es y adoptar identidades falsas.
Explícales que sólo deben chatear en páginas apropiadas para su edad, preferiblemente aquellas que tienen un moderador o supervisor de contenidos.
El chat online debería estar supervisado por los adultos.
Explica a tus hijos que no es legal amenazar o asustar a alguien por Internet.

Intenta acordar con tus hijos que compartan su perfil y blogs contigo, pero ten en cuenta que pueden crearse perfiles diferentes.
Conoce a los amigos y las actividades online de tu hijo/a.
Enseña a tus hijos/as a no ir nunca a reuniones con sus amigos de �Internet�.
Enseña a tus hijos/as a no responder a mensajes ofensivos.